Pan de árbol sin semillas."Un fruto perecedero pero delicioso"

Pan de Dios

El pan de árbol sin semillas es uno de esos frutos tropicales que llaman la atención desde lejos: grande, redondo, con una cáscara rugosa y un aroma suave que recuerda al pan recién hecho. A diferencia de otras variedades, esta versión no produce semillas, y por eso es más fácil de cocinar, más suave y mucho más usada como alimento diario en zonas tropicales. Es un cultivo ancestral que ha sostenido a comunidades completas por generaciones. (su nombre científico es Artocarpus Altilis pero sin semillas)

Cómo es y cómo crece

El pan de árbol sin semillas crece en árboles altos, de copa amplia y hojas grandes muy llamativas. Es un árbol resistente que puede vivir décadas y producir cientos de frutos cada año. No necesita mucha atención: crece bien con lluvias regulares, en climas cálidos y en suelos profundos y húmedos. Sus frutos aparecen varias veces al año, por eso en muchos países tropicales se considera un alimento de seguridad, algo así como “pan del monte” listo para comer cuando hace falta.

Dónde se encuentra

Este fruto es común en islas del Caribe, países tropicales de América Central, zonas del Pacífico y regiones cálidas de África. En lugares como República Dominicana, Puerto Rico, Haití, Jamaica y gran parte de Centroamérica crece prácticamente en los patios, solares y bordes de caminos. Es un alimento casero: casi siempre se consigue preguntando a vecinos, agricultores locales o en mercados rurales.

Por qué no se exporta

Aunque es delicioso, no es un fruto fácil de mover en comercio internacional. Se daña rápido, madura muy pronto y su textura cambia cuando pasa muchas horas fuera del árbol. Además, su cáscara se magulla con facilidad y eso complica conservarlo en cajas o contenedores. Por eso casi todo el consumo es local, directo del árbol al hogar, y son pocas las empresas que se arriesgan a exportarlo.

A qué sabe el pan de árbol

Su sabor cambia según la madurez:

  • Verde: sabe a papa, yuca o pana, suave y con un aroma parecido al pan blanco.
  • Medio maduro: se vuelve un poco más dulce y cremoso.
  • Totalmente maduro: tiene un toque dulce, parecido al plátano maduro, pero con su textura característica.

Formas de comerlo

El pan de árbol sin semillas es muy versátil y se puede preparar de muchas maneras:

  • Frito: en rodajas, queda tostado y crujiente por fuera, suave por dentro.
  • Hervido: verde, funciona como acompañamiento igual que un vívere.
  • Majado: similar al puré de papas.
  • Asado: directo al horno o al carbón, queda con aroma a pan.
  • En dulces: cuando está bien maduro, sirve para buñuelos o tortas.

En algunas culturas incluso se usa para hacer harina, panes rústicos y mezclas para postres.

Cosas curiosas

  • Un solo árbol puede producir de 150 a 200 frutos al año.
  • Hay variedades con semillas y otras totalmente estériles.
  • Fue uno de los primeros alimentos que se llevó por barco para combatir el hambre en islas del Pacífico.
  • La madera del árbol se usa para artesanías y embarcaciones pequeñas.

Dónde conseguirlo

En la mayoría de países tropicales no se vende en supermercados, sino en:

  • Mercados locales y de agricultores.
  • Colmados rurales.
  • Fincas o patios donde se cultiva.
  • Puestos en carreteras en regiones agrícolas.

Si vives en el Caribe o Centroamérica, casi siempre puedes conseguirlo preguntando en zonas rurales o barrios donde la gente tenga árboles frutales. ¿Si te gustaría probarlo haznos saber?

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